TORSOPLASTIA
La pérdida dramática de peso, fluctuaciones en el peso y el envejecimiento natural resultan frecuentemente en piel flácida en áreas debajo de la cintura. Este exceso de piel, además de no ser estético puede causar dificultad al caminar o ejercitarse, mala postura, dolor de espalda y hombros, erupciones e infecciones crónicas en los pliegues, problemas de higiene personal debido a la acumulación de sudor en las áreas afectadas y baja autoestima. La torsoplastia reafirma los glúteos, la cara posterior e interior de los muslos, las caderas y el abdomen. Esta cirugía puede ser considerada si has tenido una pérdida de peso dramática debido a cirugía bariátrica o dieta y has mantenido un peso estable durante los últimos 12 meses.
Esta cirugía básicamente consiste en extender la incisión de una abdominoplastia (que va de cadera a cadera), alrededor de todo el torso, lo cual permite al cirujano levantar y reafirmar los muslos y glúteos además de realizar la abdominoplastia. La longitud y forma de las incisiones depende de la cantidad de piel que se quiera remover. Los resultados de la cirugía aparecen casi inmediatamente. Mantener el peso y realizar actividad física pueden ayudar a preservar los resultados. La cirugía tarda aproximadamente 3 a 5 horas y el período de recuperación es de aproximadamente 6 semanas.